Diego Armando Maradona fue uno de esos futbolistas destinados a convertirse en leyenda desde que pisaron por primera vez un campo de futbol. Su debut a los 16 años con la camiseta de Argentinos Juniors fue en octubre de 1976 y en el mismo mes, pero de 1997, jugó su último partido como profesional.
Luego del positivo por doping en el Mundial de Estados Unidos 94, Maradona cumplió una sanción de 15 meses y se alistó para regresar con Boca Juniors. El debut del ‘Diez’ como ‘Xeneize’ fue un 30 de septiembre de 1995 en el Estadio Olímpico de Seúl, durante un encuentro amistoso ante la Selección de Corea del Sur.
Regresó con Boca Juniors en septiembre de 1995 | Foto: Planeta Boca Juniors (Twitter)
En aquella temporada peleó por el título del futbol argentino, pero la oportunidad se desvaneció después de caer ante Racing. Diego Maradona jugó la penúltima fecha contra Estudiantes de La Plata el 11 de agosto de 1996 y se alejó de las canchas, pero casi un año después sorprendió con un nuevo regreso al equipo de sus amores.
Con 36 años de edad, ‘El Pelusa’ sabía que sus días en el balompié estaban contados y recurrió a otro polémico deportista para intentar despedirse de la mejor manera. Maradona le pidió ayuda a Ben Johnson, atleta canadiense que conquistó la medalla de oro en los 100 metros planos en Seúl 1988.
Ben Johnson fue su preparador físico | Foto: Planeta Boca Juniors (Twitter)
En aquella justa olímpica, el velocista nacido en Jamaica impuso el récord de 9.79 segundos, pero el gusto le duró muy poco, ya que tres días después fue descalificado por dar positivo en una prueba antidopaje. A Diego Maradona no le importó el currículum de Ben Johnson y decidió contratarlo como preparador físico.
El ídolo de Villa Fiorito volvió a vestir los colores de Boca en el Torneo Apertura 1997 y al llegar a la décima fecha se presentó el partido que definió su futuro. Era un 25 de octubre y el conjunto entonces dirigido por Héctor ‘Bambino’ Veira se alistaba para disputar el Súperclásico frente a River Plate en el Monumental de Núñez.
En los días previos, Diego no se salvó de los escándalos que lo acompañaron durante toda su carrera. El ‘Pibe de Oro’ no pasó una prueba de orina, pero en aquel momento la prensa bonaerense reveló que el gobierno lo apoyó para que pudiera disputar el Clásico ante la presencia de más de 60 mil aficionados.
No pudo haber mejor escenario para su despedida | Foto: Planeta Boca Juniors (Twitter)
El adiós de D10S
Finalmente, Maradona formó parte del cuadro titular del ‘Bambino’ Veira y el árbitro Horacio Elizondo dio el pitazo inicial de un partido que pasaría a la historia. Desde los primeros instantes, el ‘Diez’ quiso tomar su habitual rol protagónico, pero de inmediato se reflejaron los años sobre la espalda y un estado físico disminuido.
Fue al 40’ cuando River Plate se adelantó con la anotación de Sergio Berti, y al mismo tiempo se acercaban los últimos minutos del gran ídolo. Diego Armando no salió al campo para la segunda mitad y su lugar lo cedió al que muchos consideraban como su heredero; un joven de 19 años con el ‘20’ en la espalda llamado Juan Román Riquelme.
En el arranque de la parte complementaria, Julio Torisani logró empatar el marcador y la polémica del Clásico tampoco tardó en llegar. El ‘Millonario’ de Ramón Díaz reclamó un penalti, pero a cambio, el capitán Hernán Díaz se fue expulsado instantes después y los visitantes supieron aprovechar el escenario.
El recién llegado Martín Palermo, recomendado por el propio Maradona, fue el encargado de marcar el tanto de la voltereta al 67’. El ‘Xeneize’ pudo controlar la ventaja y se quedó con la victoria en territorio ajeno, y como era de esperarse, el ‘Diez’ fue quien más celebró el triunfo, incluso retando a la hinchada de River Plate.
Celebró como pocas veces frente a la afición de River Plate | Foto: Planeta Boca Juniors (Twitter)
Los que asistieron al Monumental de Buenos Aires esa tarde de octubre jamás imaginaron que habían presenciado el último partido de ‘El Pelusa’ como profesional. Transcurrieron algunos días y el 30 de ese mes, fecha en la que celebraba su cumpleaños 37, anunció su retiro definitivo de las canchas.
La carrera del más grande ídolo de Argentina había llegado a su final y nada lo motivaría a cambiar su decisión. Cuatro años después, el 10 de noviembre de 2001, Diego Armando Maradona Franco reunió a un grupo de estrellas que se enfrentaron a ‘Albiceleste’ en La Bombonera para jugar su partido de despedida.
El ídolo de Villa Fiorito jugó su partido de despedida en La Bombonera | Foto: Soy Bostero (Twitter)
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