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El peleador de Nacho Beristáin que se creía invisible

Boxeador "invisible".
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Una increíble anécdota | Foto: La Esquina del Aficionado/La Opinión

A lo largo de los años, Don Nacho Beristáin ha sido uno de los mejores entrenadores de box surgidos en México y varios de sus peleadores han sido icónicos para el deporte de los puños. Sin embargo, hubo uno de ellos que se quedó en la mente del entrenador debido a que en una ocasión le dijo que era «invisible». 

En una de sus miles de anécdotas, Nacho Beristáin recordó a Víctor Manuel Rabanales, conocido también como “El Rústico”, mismo que vivió momentos de gloria en el boxeo a principios de los noventa. La cúspide de su carrera la vivió en septiembre de 1992 cuando se convirtió en en campeón mundial peso gallo del Consejo Mundial de Boxeo (CMB) tras vencer al japonés Joichiro Tatsuyoshi.

El mismo Nacho lo catalogó como un peleador muy fuerte, pero su falta de preparación abajo del ring hizo que su carrera fuera efímera. En una ocasión, en un avión rumbo a una pelea de campeonato del mundo, Beristáin iba a platicar con Rabanales, pero este se negó argumentando que no quería saber nada de la pelea debido a que era «invisible». 

«En un momento dado me dijo algo que me dejó estupefacto. Una vez veníamos en un vuelo para su primera defensa del campeonato; venía dormitando y lo desperté pues quería platicar con él porque iba a pelear a defender el título contra un peleador zurdo e iba a estar complicado. Él se enojó y me dijo: ‘Déjame dormir, porque mañana voy a correr y vengo cansado’, le digo: ‘Sí, pero es importante platicar’ y me respondió: ‘No me molestes. Déjame descansar, entiende que soy invisible'», cuenta Beristáin. 

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Foto: Agencia Reforma

Una vez que es que Don Nacho escuchó esto, se mostró bastante intrigado. Para quitarse la duda, Beristáin le preguntó porque se creía invisible y las respuesta de Rabanales fue bastante peculiar. 

«Yo me quedé extrañado y pensando, y le dije: ¿Por qué el invisible si te estoy viendo?’. Y me dijo: ‘Porque soy muy fuerte y nadie me puede ganar porque soy el invisible’. Mi cabeza me dio vueltas y le contesté: ‘será el invencible» y me contestó: ‘¡Eso! ¡Eso!'», relata Beristáin. 

¿Qué opinas de esta gran anécdota de Nacho Beristáin?

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